El Padre Héctor sigue siendo recordado en Santa Fe.

 

 

Ya han sido 52 años que se desapareció el padre Jesús Héctor Gallego, y que nunca se supo de su paradero.

 

 

A pesar de eso, el sacerdote quien era procedente de Colombia, sigue siendo recordado por cientos de pobladores del distrito de Santafe y muchas otras regiones del país.

 

 

Para el monseñor Audilio Aguilar, ya es desesperanzador la búsqueda del clérigo puesto que ya han pasado mucho años y de él no se sabe nada, pero, que aún queda una forma de agradecerle ese trabajo que realizó por las clases humildes de la región y sería solicitar al Vaticano su beatificación.

 

 

Para ello, es necesario iniciar un proceso desde la diosesis de Veraguas directa al Papá Francisco, pero, será algo que puede demorar muchos años de ser aprobado, puntualizó el Monseñor.

 

 

El padre Héctor lo recuerdan cada año, sin embargo, para las organizaciones campesinas esas luchas sociales deben continuar ya qué fue el legado qué dejo el sacerdote para garantizar mejores días en esa región norte de la provincia.

 

 

JUSTICIA O POLITICA

 

 

Para Edilma Gallego, hermana del padre, hizo énfasis en que las investigaciones sobre este caso no ha dado resultado alguno, por lo que ha considerado la justicia como «un engaño».

 

 

» Es una frustración, decepción y de todo lo que hemos sentido sus familiares, por la falta de interés que han demostrados los entes de justicia en investigar que realmente pasó y donde estas sus restos», dijo Gallego.

 

 

Expresa qué esto no ha sido más que una «patraña politica», el incubrimiento de los gobiernos y la clase politica qué han metido la mano para que nunca se sepa la verdad», dijo entre voz de desaliento la hermana Gallego.

 

También agregó qué solicitar su beatificación, sería una recompensa al sufrimiento de la familia y para  limpiar su nombre, ya que en Colombia quisieron justificar este caso refiriéndose a que el padre era militar, pero los santafereños saben la verdad que su único objetivo fue inculcar la Fe, la unidad y el trabajo para liberar al pueblo de la esclavitud por la cual habían vivido los campesinos por muchos años.