Una tradición que data de más de 50 años, había sido suspendida por la pandemia, pero que ahora se ha retomado es la tradicional venta de pescado seco, en el distrito cabecera de Soná en Veraguas.
Esta tradición consiste en que los pescadores, se preparan hasta con dos meses antes de la cuaresma de comunidades como Bahía Honda y áreas aledañas, y se trasladan con toda la familia, en botes por todo el río hasta llegar a Soná.
Adrián Montilla, es uno de los vendedores de este producto, contó que tiene 40 años de vender pescado seco y desde ese entonces, ellos se atrincheraban por cualquier esquina y ponían los productos a la venta, bajo el sol y ante cualquier inclemencia del tiempo, luego en los últimos años, se les permite ubicar sus ventas en los terrenos de la feria.
Y es que la feria del pescado seco, permite tener un platillo diferente y tradicional durante la conmemoración de la Semana Santa, pero que para los pequeños pescadores es una opción para obtener una entrada económica para sus familias, así lo manifestó Agapito Calles.
Es en verdad, un producto muy buscado, el señor Roberto Morales y la señora Sebastiana Sánchez, ambos tradicionalmente se trasladan desde sus comunidades a adquirir este producto, la cual tienen una variedad de formas de prepararlo, y son consciente que su precio no es el mismo de hace más 40 años atrás ya que todo ha aumentado de precio, pero que el costo de este producto aún sigue siendo accesible.
Este año alrededor de 60 familias se unieron a esta tradicional feria, y permanecerán hasta este domingo de pascua, con la esperanza que sus ventas mejoren para hoy jueves y viernes santos, posteriormente regresan a sus respectivos hogares.