Con una gran procesión, culminaron las festividades religiosas en honor a Santiago Apóstol, que recorrió todas calles de la ciudad de Santiago.
La feligresía esperaba desde los portales de sus casas el paso de la imagen del patrono de los santiagueños, toda vez que este año fue transportada en carro, debido a la situación que se vive en el país donde no se pueden realizar actividades que conlleve aglomeración de personas.
La iglesia en apego a estas normas sanitarias, se coordinó la peregrinación en un automóvil, para permitirle a los fieles católicos venerar la imagen de Santiago Apóstol desde sus viviendas y no dejar pasar por alto esta tradición religiosa.
De igual forma la eucaristía que fue presidida por Monseñor Audilio Aguilar, contó con la cantidad de personas dentro de la Catedral tal como lo establece las normas de salud para evitar la propagación del virus.