Un grupo de moradores de la comunidad de Boca de Corita en el distrito de Cañazas en Veraguas, vienen confrontando un serio problema desde hace más de ocho años y es que un finquero les clausuró el camino por donde han transitado siempre.
Raquel Cruz, residente afectada, manifestó que la problemática se debe a que un propietario de una finca privada cerró todos los accesos a esa comunidad y sectores aledaños, por lo que ahora tienen que caminar hasta dos horas para salir al pueblo, mientras que por la vía principal son pocos minutos para llegar a Santiago.
«Pedimos justicia, porque hay familias que tenemos pacientes discapacitados y no tenemos como trasladarlos a buscar atención médica porque los autos no pueden pasar hacia la comunidad», dijo Migdalia Mendoza otra afectada.
Encarnación Solis, poblador de la citada comunidad, agregó que ya anteriormente habían gestionado la apertura de dichos caminos, con una resolución de las autoridades competentes pero el dueño ha hecho caso omiso a dicho documento legal.
Ante tal situación las personas realizaron una protesta pacífica en la gobernación de Veraguas para que sean escuchados, donde el gobernador y la defensoría del pueblo prometieron atender el problema.
Entre las comunidades inmersas en este conflicto son Calabacito, Boca de Corita, Llano El Bajo, Llano Grande, Las Felipinas, Los Cruces y Los Aguilares, donde habitan más de 800 personas.